Capítulo 333
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Sergio miró con incredulidad a Blanqui, examinandolo de arriba abajo.
Estaba claro que no era el mismo robot de limpieza que habla comprado antes.
“El que teniamos antes no era tan grande, ¿verdad?” dijo Sergio.
Gabriela arrancó una plena de pollo frito y dijo, “Si, el anterior era tan bajo que no tenia presencia, asi que pintura y láminas de metal que no usábamos y los pull un poco“.
tomé un par
de botes de
Solo cuando Sergio vio las etiquetas de los botes de pintura detrás de Blanqui, creyó que Gabriela no estaba bromeando.
Réalmente había sido ensamblada por ella misma.
Con la configuración más básica, había creado un robot de primera categoria.
¡Su sobrina era realmente asombrosal
EL robot Blanqui se
sintió observado, se deslizó hacia atrás por medio metro y dijo.
“Amo, sé que soy la más hermosa del mundo, pero si me miras asi sin parar, me voy a sonrojar!”
¿La más hermosa del mundo?
Sergio se asombró aún más, Finalmente enteridió por qué Blanqui le resultaba familiar, porque vela el reflejo de Gabriela en ella.
Ambas eran muy vanidosas.
Después de comer,
ambos se dirigieron a la compañía.
“Que tengan un buen viaje, señores, y cuidado en el camino, Blanqui los esperará en casa“, dijo Blanqui, despidiéndolos en la puerta.
“Adiós“, Sergio le hizo un gesto de despedida a Blanqui
“Adiós“,”Blanqui cerró la puerta.
Viendo la puerta cerrarse, Sergio dijo con una cara de asombro: “Este robot es demasiado inteligente! Gabi, ¿cómo lo ensamblaste?” *¡Es muy simple! Solo necesitas escribir un programa, establecer el sistema operativo, luego configurar las órdenes de ejecución, control y almacenamiento, y algunas otras instrucciones…
Si no fuera porque el equipo era demasiado rudimentario, habría creado un robot de limpieza aún más inteligente! El actual Blanqui no podía compararse con los robots integrados que había investigado antes.
Gabriela lo explicó de manera simple, pero Sergio escuchaba sin entender nada.
Sobrina Gabi, eres increible!” Después de un buen rato, Sérgio apenas logró decir eso.
Gabriela respondió con tono ligero. “Es lo de menos, por ahora sirve. Cuando tenga tiempo, mejoraré el equipo y lo estudiaré con más detalle.”
Sergio no entendia nada…
¿Lo
de menos?
¿Un robot de limpieza tan inteligente y Gabriela lo consideraba algo común?
¡No entendia el mundo de los genios!
Mientras hablaban, llegaron al estacionamiento subterráneo.
Sergio sacó las llaves para desbloquear el coche y abrió la puerta del conductor
Gabriela tenia ganas de conducir, pero desafortunadamente aún no tenia el Carnet, así que se sento en el asiento del copiloto.
Después de los exámenes finales, definitivamente iría a sacar su licencia,
Sergio conducia muy bien.
En poco tiempo, el coche se detuvo frente a la sede de la empresa.
Se bajaron del coche y Gabriela siguló a Sergio.
Tan pronto como entraron en la empresa, causaron un revuelo.
“Caray! Esa debe ser la hija del señor Yllescas, ¿no es así? ¡Qué bonita es! Se parece un poco al señor Yllescas.”
“¡Estás locol El señor Yllescas ni siquiera tiene novia de dónde sacaria una hija?”
“Eso es cierto…….”
“Entonces, ¿quién
es clla
En ese momento, la joven llamó a su tio desde atrás
¡Todos entendieron de repentel La joven
resultó la sobrina del señor Yllescas.
No era de extrañar que fuera tan bonita.
Gabriela siguió a Sergio hasta su oficina en el tercer piso, donde la secretaria estaba organizando los documentos para la reunión de la tarde.
Sergio presentó a Gabriela a la secretaria, “Juárez, esta es mi sobrina Gabriela. Esta tarde nos acompañará a una reunión con los responsables de la compañia TOAEON para discutir un acuerdo de colaboración, ve y tráele el plan de estrategia para que Gabi le eche
un vistazo“.
Juárez se quedó atónito
¿Qué edad tenía Gabriela?
¿Dieciocho años?
¿Ella puede entender el plan de acción?
Juárez dudaba si Sergio se estaba burlando de ella….
Al ver que Juárez se quedaba parada sin reaccionar, Sergio volvió a instarle, “Juárez, ¿en qué estás pensando? ¡Ve a buscar el plan de acción!”
“¡Por supuesto, Sr. Yllescas! Juárez finalmente reaccionó.
Poco después, Juárez regresó con el plan de acción en mano, “Srta. Yllescas, aqui tiene.”
“Gracias. Gabriela tomó el documento con ambas manos, lo revisó rápidamente de principio a fin y luego se lo devolvió a Juárez diciendo, “Ya lo he revisado.”
Juárez se quedó sorprendida y pensando….
¿Ya lo había revisado?
Realmente había comprendido lo que decia el plan de acción?
Sergio continuo: “Gabi, ¿qué te parece el plan de acción, hay algo que aún necesite corrección?”