Capítulo 75
Capítulo 75
Capitulo 75 Clara solté una risita.
Ella estaba bien consiente de su relacion con Flynn Bécquer, a pesar de que él nunca la habia tratado mal, y siempre habian estado juntos a la luz del dia.
Clara se quedo en silencio. Raul se sintié muy incémodo.
Siempre habia pensado que Clara tenia un temperamento muy dulce, hasta ahora que descubrié cuan fria podia ser cuando tomaba decisiones!
~Como era que no se le ocurrié antes?
En aquel entonces, el estaba persiguiendo a Silvia Bécquer solo le tomo una llamada de teléfono para romper con Clara, pensd que ella lloraria y le suplicaria que se quedara, pero ella solo se quedo en silencio durante un minuto, y luego dijo suavemente vale
Desde aquel dia, Clara nunca volvié a contactarlo.
Era como si su pasado nunca hubiera existido, como si nunca hubiera estado enamorada de él durante cuatro afios, ella no se llevé ninguna de sus pertenencias del apartamento, y hasta se bloqueo a si misma de toda su informacion.
Su relacién con él se rompiéd completamente!
Aveces. Raul se preguntaba si Clara realmente lo habia amado alguna vez ,De qué otra manera podria olvidar tan facilmente sus sentimientos?
Raul se dio la vuelta y se fue
Cuando bajé las escaleras, sacé las llaves del apartamento de su bolsillo y las arrojé en un basurero...
Clara se quedo alli un rato
La voz de Malte venia desde adentro de la casa, “Clara, ,por qué sigues afuera?”
Clara respondio, y después de ajustar su estado de animo, entrd en la casa.
Antonio Castillo ya estaba durmiendo, por lo que Clara se limpié un poco y se preparo para irse, Maite la acompanié a la puerta. Abrio la puerta y vio un cigarro en el suelo
Marte lo entendio, y dijo un poco alterada, “Ese idiota volvié a buscarte? Clara, tienes que entender, Ratil es un sinverguenza” Clara toco la mano de Maite suavemente y dijo. “Tranquila, lo se”
En ese momento, entro la llamada de Flynn.
Marte estaba al lado, por lo que Clara se sintid un poco incémoda hablando.Content rights belong to NôvelDrama.Org.
Marte siendo considerada, se fue a su habitacion para evitar a Clara, pero cuando cerré la puerta, no pudo evitar pensar, 4qué maravilloso seria si Clara y el abogado Becquer pudieran estar juntos! Clara habia tenido una vida muy dura antes, y aunque ella no lo ha dicho. Maite pudo notar que el collar de diamantes rosa que llevaba alrededor del cuello habia desaparecido.
Era la unica posesién que le habia dejado la madre de Clara
Flynn se habia quedado en la oficina por unos dias
El viernes, llamo a Clara para decir que pasaria la noche en el apartamento, y Clara solo respondio timidamente, “Entendido.” Ya que Flynn no la habia visto en unos dias, se estaba volviendo un poco travieso
“Veo que estas muy contenta. gme extrafiaste?”
é Quieres decirme cuanto me extrarias?”
Clara penso que era muy descarado
En el exterior, Flynn parecia un abogado serio, pero en realidad era un donjuan.
Clara no queria perder ante él, y susurr6. Te extrafio, te extrafio en todo”
Flynn se quedo perplejo
No esperaba que Clara fuera tan atrevida, que ella lo provecaria Esto le hizo pensar alin mas en lo que pasaria la noche siguiente, aunque Clara insinuo que nunca antes habia estado con un hombre. Rynn siempre sintid que eso era su pequefio secreto
Trago Guavemente, luego dijo. “Eres malvada!” Clara habl6é despacio, “Ya prepare el agua para tu bafio Y colg6 el teléfono. Flynn sonrio ligeramente, y luego se solto la corbata.
Casi inmediatamente cerré su laptop, cogié su abrigo y salio, Luz Montero lo vio irse, se sintid un poco sorprendida, pensdo que el abogado Becquer (ba a trabajar hasta tarde esa noche
Flynn estaba de muy buen humor
Su trabajo reciente habia ido muy bien, y habia invitado a la secretaria Montero ya los demas a cenar después del trabajo, todos los gastos fueron cubierto por el, como agradecimiento por su arduo trabajo reciente
Cuando firm6 la cuenta, su rostro encantador mostraba una sonrisa. veia tan guapo!
“Seguro que el abogado Bécquer esta que se muere por volver a casa para ver a la Srta. Castillo, jcon esa cara de satisfaccion que tiene!“, pensaba la secretaria Montero. “Parece que le gusta mucho la Srta. Castillo! Nunca antes habia visto que el abogado Bécquer llevara a una mujer a su casa”